Autor: Alex

Siempre hemos creído que los jamones de bellota provienen de cerdos ibéricos que han sido alimentados solo con bellotas, pero debemos saber que esto, es algo materialmente imposible,¿por qué?, os lo contamos a continuación.

Para lonchear de forma adecuada un jamón, deberás tener a mano un buen cuchillo jamonero que esté afilado y a punto, para facilitarte el corte. Si nunca has tenido la ocasión de afilar uno, hoy te explicamos los pasos a seguir para que puedas hacerlo en la comodidad de tu casa.  Necesitarás una chaira, que será el elemento que utilizaras para llevar a cabo el afilado. La chaira es un cuchillo de las mismas dimensiones que el jamonero, que, en lugar de tener la hoja afilada, tiene una vara...

Club Jamonarium es el nuevo club de productos ibéricos y gourmet creado por Jamonarium. Inscribiéndose en Club Jamonarium, podrás recibir promociones y ventajas exclusivas sólo para socios del club. Te mandaremos un máximo de uno o dos e-mails al mes y podrás cancelar tu suscripción en cualquier momento. Somos expertos en jamón ibérico de bellota pata negra y serrano desde hace más de 40 años. Somos amantes de la buena gastronomía y queremos compartir nuestros productos y nuestros hallazgos...

El jamón de Trevélez tiene origen en la provincia de Granada y cuenta con el distintivo IGP (Indicación Geográfica Protegida). Estos jamones y paletas provienen de carne de cerdo blanco, o más comúnmente conocido como jamón serrano.

La normativa de etiquetado del jamón ibérico se cambió para proteger y distinguir la procedencia y elaboración de los diferentes tipos de jamón, pero sobre todo para dar al consumidor una idea concreta sobre las cualidades del producto, creando un sistema de identificación concreto que te explicamos a continuación. El precinto es la brida de plástico que lleva el jamón. Por otro lado está la etiqueta o vitola que suele estar colocada debajo del precinto.

Como todo en la vida, si se consumen sin moderación, la respuesta es sí, pueden tener efectos desfavorables en nuestro peso y otras repercusiones para nuestro organismo. La razón no es otra que su gran contenido en grasas, en sodio y en calcio que, entre otras cosas, facilitará que retengamos líquidos y pasemos a estar hinchados. Además, aumentaran nuestra presión arterial, dañando nuestros vasos sanguíneos y en consecuencia, nuestro cerebro, corazón, hígado y ojos.