Recetas de verano para chuparse los dedos

Nuestro país cuenta con un número importante de platos típicos de verano, refrescantes y que están para chuparse los dedos. ¡Hay que buscar maneras de combatir este calor! Se pueden servir a modo de tapa, como aperitivo antes de comer o directamente como plato principal en nuestras comidas, y cuentan ingredientes muy diversos.

Recetas típicas de verano

 

Gazpacho: Este plato es procedente de la zona de Andalucía y podemos decir que es uno de los platos estrella del verano porque es muy ligero y refrescante. Se elabora con tomates maduros, aceite de oliva virgen extra, vinagre de vino blanco, pimiento verde y cebolla. Hay muchas maneras de tomarlo, pero normalmente se toma solo con aceite de oliva o añadiendo huevo cocido, jamón ibérico, cebolla, pimiento y picatostes. Si los picatostes tienen algún sabor especial le darás un toque único a tu gazpacho.

 

Salmorejo: Este plato procede de Córdoba y es otro de los platos estrella del verano. Se elabora utilizando tomates maduros, pan, ajo, vinagre, aceite de oliva virgen extra y sal. Lo que diferencia este plato del gazpacho es que el salmorejo se elabora utilizando pan, por lo que la textura será más espesa. Esta sopa se suele tomar como plato único con jamón ibérico, cebolla, huevo y un chorrito de AOVE. El salmorejo como plato proviene de la Mazamorra, otra crema fría tradicional de Córdoba con una receta muy parecida pero elaborada a base de maíz.

 

Melón con jamón: Este plato es actualmente muy común en España, aunque originariamente proviene de la gastronomía italiana. Para conocer sus orígenes, tenemos que remontarnos a la gastronomía italiana del siglo XVI, momento en el que el melón era consumido antes de las comidas en muchas regiones de Italia. El contraste entre el sabor dulce del melón y el sabor salado del jamón de Parma es lo que hizo esta combinación tan popular, aunque también cabe decir que el melón se ha tomado con muchos otros embutidos típicos de las regiones del centro de Italia. En el siglo XVII, este plato llegó a España y se convirtió en un plato muy popular, aunque se consumía con jamón serrano, tradición que se ha conservado hasta la actualidad.

 

Ajoblanco: Este plato procede de Málaga y es un plato muy popular en el sur de España. Se elabora utilizando pan, almendras molidas, ajo, agua, aceite de oliva virgen extra, sal y vinagre en algunas ocasiones. Al igual que sucede con el gazpacho, es un plato muy popular en verano ya que es muy ligero y refrescante. Normalmente, se toma con uva sin pepitas o con melón.

 

Escalibada: Este plato proviene de toda la zona del litoral mediterráneo y también es típico de algunas zonas de Aragón. Se elabora utilizando tomate, pimiento rojo, pimiento verde, berenjena, cebolla, ajo, sal y aceite de oliva virgen extra. Todas estas verduras se cocinan al horno o a la parrilla, para después quitarles la piel y despepitarlas. Se preparan cortandolas a tiras y se aliñan con sal, aceite de oliva y los ajos.

 

Paella: Este plato proviene de Valencia y es uno de nuestros platos más tradicionales e internacionales. Aunque este plato sea uno de los más populares del verano y por el que se ponen hasta la bandera las terrazas al lado de la playa, se come durante todo el año en sus múltiples versiones. La paella valenciana, la paella de marisco y paella mixta son los tipos de paella más populares que existen, pero también hay más tipos de paellas y arroces que están igual de deliciosos como el arroz negro, arroz del “senyoret” (con el marisco pelado y listo para comer) o la paella de la albufera.

¿Echáis algún plato en falta en esta lista? ¿Cuál más añadiríais? ¡Os leemos!